Hablamos de Ana Frank
En este hablemos
de nos centraremos en la figura de Annelies Marie Frank, más conocida en
español como Ana Frank.
Ana Frank nació en Fráncfort de Meno (Hesse, Alemania) el 12 de Junio de 1929, siendo la segunda hija
de Otto Heinrich Frank (1889-1980) y Edith Hollander (1900-1945). Tuvo
una hermana mayor llamada Margot (1926-1945). Su familia era de ascendencia
judía. Su padre, Otto participó en la I Guerra Mundial como teniente del
Ejército alemán.
En aquella época, las cosas en Alemania no iban del todo bien: había
poco trabajo y mucha pobreza y hambre. Por otro lado, Adolf Hitler ganaba más
aliados en su partido. Para obtener el apoyo de la gente, jugaba con los
sentimientos antisemitas que se caldeaban en el ambiente, por consecuencia del
odio creado hacía los judíos y la situación económica tan decadente, la familia
Frank tuvo que trasladarse a Ámsterdam.
Ana se acostumbró a su nueva vida: aprendió el idioma, hizo muchos
amigos y asistió a un colegio holandés de la zona, en cambio para su padre no
fue tan fácil, Otto intentó fundar un negocio en Inglaterra sin éxito,
finalmente se unió al comercio de pectina, la venta de hierbas y especias.
El 1 de septiembre de 1939, cuando Ana tiene apenas 10 años, la alemana
nazi invadió Polonia, dando comienzo a una etapa sangrienta y perturbadora: La
II Guerra Mundial. Unos escasos meses después, el 10 de mayo de 1940, la
alemana nazi también invadió los Países Bajos. El Ejercito holandés se rindió
solamente cinco días después. Poco a poco, los ocupantes insertaron numerosas
leyes y reglas, que entorpecía la vida de los judíos como prohibir ir al parque, al cine, a las tiendas… Como consecuencia del nuevo reglamento, Ana
no podía disfrutar de aquellos lugares. Su padre perdió el control de su
compañía porque no se permitió que los judíos pudieran ser propietarios de
compañías, Además, todos los niños judíos deberían ir a una escuela para
judíos.
Cada vez los nazis obtenían más poder. Los judíos tenían que usar una
estrella de David como identificación; también hubo ciertos rumores que decían
que todos los judíos estaban obligados a abandonar el país.
El 5 de Julio de 1942, Margot, la hermana de Ana, recibió una citación
ordenándole presentarse para su deportación a un campo de trabajo. Los padres
desconfían y no creían que se tratase de trabajo, por lo que Ana fue informada
de un plan que había tramado Otto con sus empleados de mayor confianza: la
familia se escondería
Un poco antes de esconderse con su familia, para su decimotercero cumpleaños recibió un regalo que marcaría su vida: un diario. Inmediatamente,
Ana consideró el diario como una amiga confidencial a la que llamaría Kitty:
12 de junio de 1942
Espero poder confiártelo todo como aún no he podido hacer con nadie, y
espero que seas un gran apoyo para mí.
En el escondite vivieron desde el 9 de julio de 1942 hasta que fueron
descubiertos el 4 de agosto de 1944. En el escondite estuvieron en total 8
personas: Otto y Edith Frank; ella y su hermana mayor
Margot; Fritz Pfeffer, un dentista judío (al que Ana dio el nombre de Albert
Dussel en su Diario), y la familia van Pels (identificada como van
Daan en el Diario), formada por Hermann y, Auguste van Pels y el hijo de
ambos, Peter.
En los dos años que estuvo
escondida escribió en el diario sobre lo que ocurría en La casa de atrás como
es conocido, pero también sobre su miedo a vivir escondida tantos años, sus
sentimientos hacían Peter, los conflictos con sus padres, sus deseos de ser
escritora, Además, escribía cuentos, comenzó una novela y escribía citas en su Cuaderno de citas buenas, que copiaba de
los libros que leía. La escritura la ayudaba a sobrellevar su nueva etapa en La
casa de atrás. Pocos antes de ser descubiertos, Ana empezó a reescribir su Diario con la intención de publicarlo
tras la guerra.
El martes, 1 de agosto de 1944, fue el último día que escribió en el
diario, a 3 días de ser descubiertos. Los oficiales de policía descubrieron el
escondite y los arrestaron. La policía también detuvo a dos que los ayudó.
A pesar de esta detención, gran parte de los escritos de Ana fueron
conservados: dos amigas del padre de Ana salvaron los papeles antes de que La casa de atrás
fuera saqueada por los nazis.
Los escondidos estuvieron primeros en la oficina de la policía de
seguridad alemana (Sicherheitsdienst), de ahí
pasaron a la prisión de Ámsterdam y el campo de tránsito Westerbork, hasta que
los nazis los trasladaron a al campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau. El viaje
en tren duró tres días, allí Ana se encontró con más de mil prisioneros, era un
vagón abarrotado, para transporte de animales. Había poca comida y agua y solo un
barril como retrete.
A su
llegada a Auschwitz, los médicos nazis realizaron una selección y decidieron
quiénes podían realizar trabajos forzados. Unas 350 personas, que fueron
trasladadas con Ana, fueron asesinadas directamente a las cámaras de gas. Ana
fue mandada al campo de trabajo junto con su hermana y su madre. Otto, en
cambio fue enviado a un campamento de hombres.
A
principios de noviembre de 1944, fue trasladada nuevamente junto con su hermana al campo de concentración de Bergen- Belsen, mientras que sus padres
permanecieron en Auschwitz. Las condiciones en Bergen-Belsen eran miserables:
casi no hay comida, hacía mucho frío. Ana y Margot contrayeron fiebre tifoidea.
En febrero de 1945, ambas fallecieron a consecuencias de la enfermedad, primero
Margot, y al poco tiempo Ana.
De todos
los escondidos, solo sobrevivió a estas atrocidades Otto, el padre de Ana.
Fue liberado en Auschwitz por los rusos y regresó a los Países Bajos. Tomó
conciencia de que su esposa, Edith había fallecido. En los Países Bajos recibió
la triste noticia de que sus hijas: Ana y Margot tampoco sobrevivieron. Miep Gies, una de las
personas que colaboró a esconderlos, le entregó el Diario de Ana. Tras leerlos quedó impresionado por los escritos.
Como última voluntad de su hija, decidió intentar publicar el Diario. Al preguntarle muchos años después sobre su primera reacción, respondió sencillamente:” Nunca
supe que mi pequeña Ana era tan profunda”.
Otto Frank llevó el diario a la historiadora Anne Romein, quién intentó
publicar el Diario sin éxito. Su
esposo, Jan Romein escribió un artículo sobre el libro con el título de
“Kinderstem” (La voz de una niña) en
el periódico Het Parool el 3 de abril
de 1946.
El Diario fue finalmente
publicado en 1947 en los Países Bajos por el editor Contact de Ámsterdam bajo
el nombre de Het Achterhuis (La casa de atrás). Fue
reimpreso en 1950.
En 1955, apareció la primera traducción del diario en español bajo el
título de Las habitaciones de atrás.
Ese mismo año, Albert Hackett escribió una pieza teatral basada en el Diario, estrenada en Nueva York,
recibiendo el Premio Pulitzer de Teatro. La pieza fue llevada a la gran
pantalla en 1959 bajo el nombre de El
diario de Ana Frank. La película obtuvo dos premios Oscars. Despertó mucha
atención que aumentó el interés del libro.
El Diario tuvo mucha
popularidad, que hoy es lectura obligatoria en Bachillerato de varios países.
En febrero de 2008, en Madrid se estrenó el musical de El diario de Ana Frank – Un canto a la vida,
siendo la primera vez que la Fundación Ana Frank cedió los derechos a una
empresa para representar un musical sobre Ana Frank y su obra en todo el mundo.
Se ha hecho varias películas y series sobre Ana Frank:
El diario de Ana Frank. (1959) mencionada anteriormente.
El diario de Ana Frank. (1995) película animada.
El diario de Ana Frank. (2009) serie
El diario de Ana Frank. (2009) película
En su introducción a la primera edición del Diario en
los Estados Unidos, Eleanor Roosevelt lo describió como
“uno de los más sabios y conmovedores comentarios que he leído sobre la guerra
y su impacto en los seres humanos”.
El escritor soviético IIya Ehrenburg : "una voz que
habla por la de seis millones; la voz no de un sabio o un poeta, sino la de una
muchacha corriente".
Hillary Rodham Clinton , en su
discurso de acogida de un Premio Humanitario Elie Wiesel en
1994, citó el Diario de Ana Frank y dijo que “nos despierta
frente a la locura de la indiferencia y el terrible precio que supone para
nuestros jóvenes” que relacionó con los recientes acontecimientos ocurridos
en Sarajevo, Somalia y Ruanda.
El 3 de mayo de 1957, un grupo de ciudadanos, incluido el padre de Ana,
crearon la Fundación de Ana Frank en un último esfuerzo de salvar el edificio
de la achterhuis en Prinsengracht de la demolición, y para
hacerlo accesible al público. La casa de Ana Frank abrió sus puertas el 3 de
mayo de 1960, que se basaba en el almacén Opekta, las oficinas y las achterhuis sin
muebles para que los visitantes puedan caminar libremente. También se conservan
algunos objetos personales de sus antiguos inquilinos como las fotografías de
estrellas de cine pegadas en la pared de Ana.
La casa de Ana Frank convertida
en museo es una de las principales atracciones de los turistas, que atrae más
de medio millón de personas.
Ana Frank se ha convertido en un símbolo de Holocausto y más ampliamente
como una representante de la gran persecución.
Martes, 1 de agosto de 1944
Al final, termino volviendo mi corazón con el lado malo hacía fuera y el
bueno hacía dentro, buscando siempre la manera de ser como de verdad me
gustaría y cómo podría ser…si no hubiera gente en este mundo.
Esa son las últimas palabras recogías en la publicación de El diario de Ana Frank
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